La palabra es "escrotoplastia", un procedimiento de cirugía estética que tiene como objetivo eliminar el exceso de piel y las arrugas en el escroto, para acabar con los habituales y antiestéticos huevos colganderos.
En la imagen superior podemos ver una simulación artística de lo que sería el antes y el después del proceso.
El cirujano especialista en el tema Dr. Gerard Lamb explica en el Daily Mail que la demanda de este tipo de intervenciones ha crecido enormemente en los últimos tiempos y él no es nadie para quitarle la ilusión a un hombre preocupado por el aspecto de sus cojones. Ya sabemos que 9 de cada 10 cirujanos plásticos entrevistados consideran que "el cliente siempre tiene razón si acepta pagar la factura".
La verdad es que tiene sentido. ¿Quién no querría tener unos huevos tersos y suaves como los de las Bike Balls? Por cierto, Dr. Lamb ¿sería factible colocar también una luz LED dentro del escroto, entre los dos testículos? No me diga que no es una idea interesante. Ahí lo dejo.
Visto en Neatorama
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