Los tarotistas están de capa caída, y no es extraño. Cada día es más difícil convencer a los incautos de que su destino puede ser adivinado en base a dibujitos en cartas de una baraja.
Ante esta evidencia, una opción puede ser intentar poner al día las arcaicas cartas del Tarot. Un hacker ruso infectándote via ransomware, trolls, gatitos, aliens o acosadores son figuras que pueden substituir perfectamente a los inútiles demonios, sacerdotisos o emperadores del Tarot original.
¿Te echo las cartas? Te las envío por Whatsapp.
Via LaughingSquid